Junto con cumplir con nuestro compromiso de aportar al reconocimiento de la profesión médico veterinaria desde hace siete años, con publicaciones semestrales de este Boletín Veterinario Oficial, este año 2011, “Año Veterinario Mundial”, hemos querido estar presentes con un número que sentimos “especial”, porque refleja cómo visualizamos el crecimiento de nuestra profesión a través de nuestro quehacer y de las proyecciones que actualmente tenemos en la División de Protección Pecuaria (DPP) del SAG. Posiblemente no sea del todo coincidente con lo que cada uno de ustedes ejerce en sus actividades profesionales, pero creemos que si cada uno profundiza y analiza su quehacer de cada día, verán que desde sus competencias han aportado fundamentalmente al crecimiento y posicionamiento de nuestra profesión, tanto nacional como internacional.
En el afán permanente de aportar como Servicio Veterinario Oficial (SVO) de Chile, en este número hemos querido a analizar, desde la perspectiva de la profesión, cuál ha sido y es nuestro aporte al crecimiento del sector pecuario nacional, conscientes de que sin el compromiso y trabajo del sector industrial, productor, académico y de la práctica privada, sería imposible estar hoy, como país, en el lugar que nos encontramos, que es de reconocimiento internacional respecto la realización de un trabajo sistemático, apegado a la legislación, que respeta las directrices internacionales de los organismos competentes y que como prueba de ello el país muestra una condición zoosanitaria de excelencia, en la práctica reconocida por la aceptación de nuestros productos pecuarios en exigentes mercados mundiales.
Es por ello que los invito a profundizar en este número, donde se da cuenta no sólo del parecer actual de la DPP del SAG respecto de su aporte al Año Veterinario, sino que, junto con ello, conocer la motivaciones y metas que se plantearon los anteriores jefes de esta División, así como también recoger el conocimiento y opinión del sector industrial nacional asociado, de organismos internacionales estrechamente vinculados y también de algunos de los médicos veterinarios oficiales que cumplen funciones en sectores claves para el país, por ejemplo, en las regiones extremas del territorio nacional, cuyo accionar, si bien se realiza en condiciones geográficas totalmente distintas a las del sector más central, persiguen las mismas directrices que nos mueven como institución, además de los ideales que juramos como médicos veterinarios, que especialmente en este año tan importante debemos recordar:
“Juro que cumpliré con honradez y seriedad todas las finalidades de mi profesión.
Trataré por cuantos medios científicos estén a mi alcance, proteger la vida de los animales útiles al hombre, así como evitaré su sufrimiento innecesario.
Protegeré la salud del hombre de las enfermedades que los animales le puedan transmitir.
Emplearé las técnicas más apropiadas para obtener de los animales los alimentos que beneficien al hombre, que mejoren su nutrición dentro de un amplio servicio social y colectivo.
Respetaré y honraré a mis maestros, estimaré a mis colegas y trataré conforme a las normas de la ética profesional e igual cosa haré con las personas que soliciten mis servicios dentro de la medicina de los animales y la zootecnia.
Ofrezco estudiar y superarme permanentemente para cumplir con eficacia la labor profesional que tengo encomendada”.
Héctor Escobar Candia
Jefe (I) División de Protección Pecuaria
Servicio Agrícola y Ganadero, SAG
http://www2.sag.gob.cl/Pecuaria/bvo/BVO_12_II_semestre_2010/inicio.htm